lunes, 21 de mayo de 2018

19.20. MAYO. RETIRO DE PENTECOSTES


!!!VEN ESPÍRITU SANTO¡¡¡






Ven, Espíritu De Dios, manda tu luz desde el cielo.

Padre amoroso del pobre, don, en tus dones espléndidos. 

Luz que penetra las almas,


Fuente del mayor consuelo.
Ven, dulce huésped del alma,
descanso de nuestro esfuerzo;

tregua en el duro trabajo,

brisa en las horas de fuego,

gozo que enjuga las lágrimas,

y reconforta en los duelos. 


Entra hasta el fondo del alma,
divina luz y enriquécenos. 

Mira el vacío del hombre

si tú le faltas por dentro;

mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento.


Riega la tierra en sequía,
sana el corazón enfermo,

lava las manchas,

infunde calor de vida en el hielo,

doma al espíritu indómito,

guía  al que tuerce el sendero.


Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos.

Por tu bondad y tu gracia

dale al esfuerzo su mérito;

salva al que busca salvarse

y danos tu gozo eterno.











Gál5,1. 13-14.22-25.frutos del Espíritu



Creemos en el Espíritu:

 Cuando tenemos una esperanza total en la vida, a pesar de nuestras caídas y nuestras dudas,

 Cuando se siente la desesperación y, sin embargo, se experimenta un consuelo interior que nadie nos puede quitar,

Cuando experimentamos el desgarrón de la muerte propia o ajena y la sabemos asumir con fe y esperanza,

Cuando aceptamos libremente una responsabilidad, aunque no tengamos claras perspectivas de éxito y de utilidad

Cuando vivimos con serenidad y perseverancia la existencia de cada día, a veces amarga, decepcionante y aniquiladora, y la aceptamos por una fuerza cuyo origen no podemos abarcar ni dominar,

Cuando nos entregamos sin condiciones y cuando el caer se convierte en un verdadero estar de pie,

Cuando en el fondo de nuestros interrogantes y nuestros conocimientos nos sentimos abrazados por un Misterio que nos acoge y nos salva y que experimentamos como el fondo más profundo y auténtico de nuestro ser,

Cuando vivimos las tinieblas del aparente sin-sentido en  confianza,

Cuando vivimos las experiencias fragmentarias del amor, la belleza y la alegría, como promesa del amor, la belleza y la alegría plena que un día recibiremos junto a Dios, nuestra vida, porque esperamos una promesa que no podemos entender,

Cuando somos capaces de orar en medio de las tinieblas y el silencio, sabiendo que siempre somos escuchados, aunque no percibamos una respuesta que se pueda razonar.


Karl Ranher sj.