miércoles, 30 de mayo de 2018

25 mayo fiesta de MAGDALENA SOFIA



La obra de Dios se hace en la sombra y lentamente"
(Santa Magdalena Sofía)

El jardin crece y se adorna 



El porche de la casa se renueva

Invitamos a "los amigos" del pueblo para celebrar la memoria y el recuerdo de Sofía

"Hay manantiales que permanecen largo tiempo desconocidos; 
existen, pero algún obstáculo les impide manar.
Quitad un poco de tierra, apartad aquello que los esconde a nuestra mirada
y enseguida veréis aparecer un agua clara y limpia"

(Santa Magdalena Sofía Barat
La acción debe ser serena, a veces lenta, porque es necesario esperar los momentos del Señor, y no actuar más que movidos por su divino Espíritu"

 (Santa Magdalena Sofía Barat)

"¡Nada de desanimarnos por lo que pase! Volvamos siempre a la oración, o a la acción, cuando el Espíritu Santo lo pida y tratemos de seguir su divina influencia en todas nuestras obras"

(Santa Magdalena Sofía Barat)
El día 25 de Mayo celebramos agradecidas/os el día de Sta Magdalena Sofía Barat, fundadora de la Sociedad del Sagrado Corazón: una mujer de Dios para el mundo.
Su vida estuvo hecha de hilos tejidos de la Mano y el Amor de Dios:
“… los hilos que el Dios tejedor comenzó a trenzar, sigilosamente… esa obra que ahora agradecemos y celebramos:
- el hilo del fuego que la trajo al mundo y que iba a encender su espíritu;
- el hilo de las viñas que la vieron nacer y crecer y de las que iba a aprender cómo el sarmiento se adhiere a la cepa para vivir;
- el hilo de un hogar sencillo que le dio el gusto por la sobriedad y la pobreza;
- el hilo de una formación humana e intelectual, insólitas para una muchacha de su época, que preparaban a la futura educadora;
- el hilo de las separaciones: de sus padres, de sus compañeras, de un tipo de vida divertido y superficial…y de los encuentros: París como un nudo de relaciones; L.Brouillard, que comenzó a guiarla por el camino de la confianza, aunque por poco tiempo;
- el hilo de las lecturas: santa Teresa, que le hizo sentir el atractivo de la oración; san Francisco Javier, que le contagió la urgencia de llevar a otros el Evangelio; la vida de Margarita María, que le dio la clave de que el amor al Corazón de Cristo podía conciliar los dos atractivos…”    

(D.Aleixandre. A la sombra de la Palabra. Orar con Magdalena Sofía Barat, p. 8)