sábado, 27 de diciembre de 2014

La Sagrada Familia

"No temas, Abrám. Yo soy para ti un escudo. 
Tu recompensa será muy grande". (Gn 15.1-6)


Por la fe, Abraham, cuando fue puesto a prueba, presentó a Isaac como ofrenda: él ofrecía a su hijo único, al heredero de las promesas,
a aquel de quien se había anunciado: 
De Isaac nacerá la descendencia que llevará tu nombre.

El niño iba creciendo y se fortalecía, lleno de sabiduría, y la gracia de Dios estaba con él. (Lc 2.22)

Fiesta también de los Santos Inocentes
.

.FELIZ DÍA